Índice
- Presentación
- Las alternativas
- ¿Cuál sería la solución?
- ¿Por qué se adoptó y se mantiene
el control de cambio?
- ¿Se puede liberar el mercado
cambiario sin que se afecten las reservas del Banco Central?
- ¿Cómo quedarían las reservas del
Banco Central?
- Las medidas concretas
- Efectos de esas medidas
- Presentación
En Venezuela abundan expertos cuya
especialidad es hacer diagnósticos presentando panoramas sombríos pero muy
pocos plantean soluciones posibles, factibles de realizar. El otro obstáculo es
que quienes dirigen las instituciones tampoco se atreven a explorar nuevos
caminos, es decir, a innovar para solucionar los problemas. Eso es lo que ha
ocurrido con la situación monetaria y cambiaria desde el año 1983 cuando en
tiempos del presidente Luis Herrera Campins se devaluó la moneda y desde
entonces el país ha estado sumergido en el círculo vicioso devaluación-inflación-devaluación
del que no ha podido salir. Prueba de lo
anteriormente afirmado es que este año 2013 Venezuela cumple treinta años con
un control de cambio y una devaluación acumulada de 146.511 por ciento, ya que
la cotización de la divisa norteamericana pasó de 4,30 a 6.300 bolívares entre
1983 y este año 2013; recuérdese que en el año 2008 se le quitaron los tres
ceros a la moneda, por lo que Bs. 6,30 de ahora equivalen a 6.300 bolívares del
2008, pero si se consideran las cifras del mercado que no se puede nombrar la
devaluación es verdaderamente escandalosa. Por esas razones se justifica plantear
soluciones a ese grave problema que afecta la vida de todos los ciudadanos.
Para comprender en forma práctica cómo
funciona la economía de un país podemos compararla al funcionamiento de otro
sistema complejo, el cuerpo humano, que
trabaja en forma armónica: si se produce una
alteración en cualquiera de sus órganos el sistema en su conjunto se
afecta. Esto lo comprendieron muy bien los pioneros de los estudios económicos,
como los fisiócratas, quienes por su condición de médicos pudieron hacer las
analogías entre el funcionamiento de la economía y el funcionamiento del cuerpo
humano como sistema. A pesar del tiempo transcurrido y de todo el avance
alcanzado posteriormente por el pensamiento económico, la idea de los
fisiócratas del funcionamiento de la economía como un sistema integrado tiene y
tendrá siempre plena vigencia.
En forma de metáfora podríamos decir que la
moneda es a la economía lo que la sangre es al cuerpo humano; por ello, si no
se soluciona el problema monetario y cambiario el resto de las actividades
económicas se verán siempre afectadas. Esa es la causa principal de la
inflación, la especulación y la escasez de bienes y servicios que sufre
actualmente el país, fenómenos que amenazan la estabilidad política y social.
2. Las
alternativas
a)
Crear una nueva moneda a la par el dólar que he
llamado el bolívar oro o
b)
Continuar con el bolívar fuerte pero realizando
cambios radicales en su valor respecto al dólar (revaluando) y haciendo también cambios radicales en la
estructura de costos, precios y salarios de la economía.
3. ¿Cuál
sería la solución?
En cualquiera de los dos casos la solución
sería la libertad para que la banca pública y privada venda libremente divisas y todos
los ciudadanos puedan adquirirlas a un precio fijo.
4.
¿Por
qué se adoptó y se mantiene el control de cambio?
Esa es la pregunta clave para comprender la
situación de la economía venezolana. El control de cambio se adoptó porque el
propio Estado y los actores económicos y financieros privados expoliaron las
reservas internacionales y el país se vio obligado a instaurar el control para
proteger lo poco que le quedaba de reservas. Por esa misma razón se mantiene la
restricción en el presente. El temor es que si se permite la compra libre de
divisas los actores económicos y financieros acaben las reservas
internacionales del Banco Central en pocos días.
5. ¿Se puede liberar el mercado cambiario sin
que se afecten las reservas del Banco Central?
Esa es la otra pregunta clave. Pienso que si
es posible. El mecanismo que he ideado es el siguiente: si se libera el mercado
cambiario y se adopta una política que brinde seguridad e incentivos a las
inversiones, las empresas nacionales y los bancos públicos y privados podrían captar
divisas en los mercados internacionales y en el mercado nacional debido a la
inversión de actores económicos nacionales y extranjeros en el país. El capital
nacional e internacional busca siempre mercados donde invertir y llevan sus
divisas a mercados donde encuentran rentabilidad
y seguridad. La libertad de cambio atraería un volumen importante de inversión nacional
y extranjera pero ello requiere de una política de Estado orientada a promover
la inversión.
6. ¿Cómo quedarían las reservas del Banco
Central?
El Banco Central garantizaría a la banca pública y privada las divisas sólo para sectores prioritarios para el desarrollo
nacional: alimentos, medicinas e insumos para la agricultura y la industria. El
resto de las importaciones y pagos internacionales, como divisas para viajeros,
deben ser hechos con las divisas que capte la banca privada en el mercado
interno y externo.
Adoptando esa medida tal como la he enunciado
no se debe temer a una estampida de divisas del Banco Central, ya que éste
garantizaría divisas únicamente para las actividades prioritarias ya señaladas.
Las instituciones financieras públicas y privadas reactivarían sus departamentos
internacionales y sus mesas de cambio y quedarían pues en libertad para captar
divisas a nivel nacional e internacional y podrían venderlas libremente al
precio oficial. Esa es la diferencia fundamental con el sistema actualmente
vigente.
7.
Las medidas concretas
- Formular una nueva política monetaria y
cambiaria.
- Derogar la Ley de Ilícitos Cambiarios y
permitir la venta libre de divisas en el país a una tasa fija, bien sea con la
nueva moneda, el bolívar oro a la par del dólar que he propuesto o, bien, a
través del bolívar fuerte, pero revaluado, con las limitaciones anteriormente
explicadas.
- La nueva política monetaria y cambiaria
implicaría, de hecho, la aplicación de un esquema estricto de control de costos
y precios en toda la economía y un
control de importaciones para evitar lo superfluo y la promoción de la
producción nacional de bienes y servicios en forma intensa, especialmente de la
agricultura y la industria.
8.
Efectos de esas medidas
Se acabaría con la especulación en el mercado
no oficial de venta de divisas que actúa como marcador de los precios en el
resto de la economía estimulando la especulación, se incrementaría la producción
nacional de alimentos y bienes producidos por las industrias y, en
consecuencia, se podrían dar los pasos necesarios para el control de la
inflación, la especulación y la escasez.